Harley Davidson FLSTF Fat Boy

El corcel de Arnold Schwarzenegger ha cambiado. La Fat Boy ha sufrido un importante cambio para este año modelo 2007, tanto estético como mecánico. Así que, de nuevo a la carretera…Big Twin para Big BoyToda la gama Harley-Davidson está equipada ahora con el nuevo bloque Twin Cam 96, que tiene una cilindrada de 1584 cc, y envía las 88 pulgadas cúbicas a los perros. El nuevo bicilíndrico en V tiene más potencia y par, inyección secuencial de combustible y un innovador sistema activo de admisión y escape para aumentar las prestaciones al tiempo que cumple la normativa Euro3. El aumento de cilindrada se consigue ampliando la carrera del pistón de 101,6 a 111,1 mm, mientras que el diámetro permanece inalterado. El principio activo de los sistemas de admisión y escape es la apertura de válvulas situadas en la zona de estos componentes, controladas por el régimen del motor y la apertura del acelerador. La transmisión también se ha revisado, la caja de cambios gana una sexta marcha y los piñones se han rediseñado para una mayor suavidad y menos ruido. Otras características incluyen un eje equilibrador para reducir las vibraciones, un árbol de levas más ligero y resistente, pistones y bielas más ligeros para maximizar el rendimiento, una nueva bomba de aceite con mayor caudal y un nuevo tensor automático para la cadena de transmisión primaria. ¿Buscas motos de ocasión? En Crestanevada tienes las mejores motos de segunda mano del mercado.

Los cambios en el motor fueron acompañados de una importante remodelación. Las ruedas son ahora más grandes -17″ en lugar de 16″- y más anchas -¡el neumático trasero ha pasado de 150 a 200 mm! El motor está pintado con una hermosa pintura epoxi negra, acompañada de un depósito de aceite cromado en forma de herradura y tapas cromadas. El guardabarros trasero se ha hecho más ancho para cubrir la nueva rueda, el asiento bicolor, decorado con remaches de cabeza de bala, se prolonga hacia delante mediante una tira de cuero, rodeando el velocímetro y cubriendo parcialmente el depósito de combustible Fat Bob de 18,9 litros con tapón de rosca para mayor autenticidad. También se ha añadido un indicador de combustible. El tacómetro sigue siendo analógico, el totalizador digital ofrece una función de reloj y viajes parciales. Las luces de advertencia habituales están integradas. El nuevo manillar custom se ha mejorado con unos Risers Bare Knukle más grandes y el cableado se oculta en el tubo, una ventaja para mantener la electricidad al abrigo de la intemperie y una interesante practicidad que también facilita la limpieza. En los extremos del manillar se encuentran los intermitentes cromados, que se recuerdan automáticamente cuando se levanta la moto. Al mirar hacia abajo, las miradas se dirigen al gran faro delantero, que está fijado a una nueva vaina cromada de la horquilla. El sistema de disuasión se ha simplificado enormemente, por lo que ya no hay que tirarse de los pelos para entender cómo funciona: basta con guardar el llavero transpondedor en el bolsillo cuando te acerques a la moto; la alarma se desactiva sola y se reactiva en cuanto te alejas de ella. La dirección puede seguir bloqueándose accionando el cilindro situado en el lateral de la columna, y el interruptor puede bloquearse mediante la cerradura situada bajo la tapa.

Llevo tanto tiempo soñando con decir esta frase… Sin embargo, al no tener la estatura de nuestro T800, se lo pedí más amablemente. El ritual de arranque es muy sencillo: encendido, esperar a que se apague la luz de «check engine» y pulsar el botón del estrangulador. El gran bicilíndrico en V con inyección de combustible cobra vida rápidamente con un sonido similar al de una Harley. Está claro que el nuevo sistema de escape ha contribuido a un sonido más amortiguado al ralentí, para no despertar a todo el vecindario el domingo por la mañana. Se notan algunas pequeñas vibraciones, pero nada importante. La posición de conducción es la típica, los pies hacia delante, apoyados en grandes estriberas, los brazos moderadamente estirados y extendidos para encontrar el manillar. Sin embargo, la postura no es tan cansada como parece. La primera se engrana fácilmente, acompañada de un familiar «clang», el embrague es progresivo y no requiere el agarre de un culturista. Hay que tener cuidado al levantar el caballete, ya que no está equipado con un rompe contactos. La palanca de cambios de doble radio contribuye a la comodidad de la selección, y evita ensuciarse los zapatos al subir de marcha, basta una simple presión sobre el brazo trasero. El desbordante par motor del bloque de 1584 cc es omnipresente, arrastrando el conjunto sin esfuerzo y con vigor desde las revoluciones más bajas. Es ideal para viajar, ya que no tienes que usar el pie izquierdo para mantener el motor en el rango de revoluciones adecuado, al estar tan lleno de potencia. El ruido típico se hace más fuerte al girar el acelerador, contrastando con el nivel de ruido al ralentí, pero contribuyendo al placer de conducir una máquina así. Pero, ¿qué ha pasado con las vibraciones? Gracias a la incorporación de un eje de equilibrado juiciosamente colocado en el motor, éstas se han eliminado, ¡una clara ventaja para el confort! La nueva caja de cambios también es una delicia de utilizar, ya que la selección es suave y precisa, la gama de marchas está bien estudiada, pero la posición neutra es a veces difícil de encontrar. La adición de la sexta marcha permite reducir el esfuerzo del motor reduciendo el régimen a velocidad de crucero, y en uso, demuestra que no es una sobremarcha, y la aceleración es tan clara como en las otras marchas. Una vez que has cambiado a esta última marcha, aparece un indicador «6» en el salpicadero. A la hora de parar, los dos discos de 292 mm de diámetro -uno delantero y otro trasero- exprimidos por pinzas de 4 pistones, son lo justo para detener el respetable peso de la moto, que con sus 313 kg en seco, tiene unas distancias de frenado bastante largas, debido a su inercia. Si a esto añadimos un pedal de freno trasero sobredimensionado, con un gran brazo de palanca, que tiende a pisarse mucho, la rueda trasera tendrá cierta propensión a bloquearse en caso de frenada de emergencia. Por tanto, ¡anticipación es una buena palabra! El apetito de nuestro corcel fue más allá de lo que esperábamos: se constató un consumo medio de 7 a 8 litros en un recorrido urbano y extraurbano. Quizás un poco más de rodaje la haría menos glotona, ya que la máquina era casi nueva en el momento de la prueba.